Una adolescente nos comenta que no puede dejar de mentir.
Enhorabuena, ya has descubierto que tienes un problema con la mentira…ya has dado el primer paso para su curación. Que es aceptar el defecto. Y querer ponerle remedio.
No tienes que internarte, ni tomar ningún medicamento. Basta con que te preguntes muy seriamente ¿a qué tienes miedo?. Porque tus problemas emocionales, tu soledad y tu tendencia a mentir tienen una base común. Y es que como tu misma escribes «sientes miedo a que te critiquen»…¿porqué te han de criticar? ¿qué es lo que no te gusta de tí misma?.
Para empezar toma lapiz y papel y escribe una lista de las cosas que te producen miedo.
Después haz una lista de los defectos que no te gustan en tí.
Después haz una lista de las virtudes te gustaría tener.
Y finalmente compara las listas y toma una decisión por semana. Esta semana voy a trabajar en «decir la verdad». Al final del día asomate a tu cuaderno de listas y apunta las veces que has dicho la verdad y las veces, que casi sin darte cuenta has mentido.
Lleva la cuenta diaria y semanalmente. La modificación de nuestra personalidad depende de cada cual, tú misma te haces y te realizas como persona. Es como tu peso, si quieres adelgazar nadie mas que tú tiene que observar una dieta. Y si quieres aprender inglés pues nadie mas que tú tiene que estudiar.
Es cuestión de marcarse una meta y trabajar, trabajar, trabajar por conseguirla. Animo y perseverancia, estamos deseando saber que te encuentras mucho mejor
¿Y tú que opinas?