Varias madres nos comentan la dificultad de comunicación con sus hijas adolescentes debido a la mentira. Unas mienten para salir por la noche, otras mienten sobre los resultados escolares, otras mienten sobre los amigos y las diversiones. Todas las madres finalizan con la misma pregunta: «¿qué hacer?».
Entender un problema y ponerse en camino para solucionarlo es ya el primer paso, el mas importante para encontrar la solución. Así pues enhorabuena a las madres que nos han escrito.
Nuestra primera recomendación es que repitan muchas veces «la verdad me hará libre», que es una frase de San Pablo. Y sólo buscando cada cual su libertad personal, su verdadera felicidad, encontrarán las adolescentes la fuerza interior para vencer las mentiras. Porque las mentiras son pequeñas cobardias, unas veces para aparentar ser mejores de lo que en realidad somos. Otras veces para evitar castigos o reprimendas por una acción mal hecha…Afrontar la verdad es mejor para cada persona porque aporta seguridad personal, satisfacción íntima y autoconfianza. Es preciso convencer al adolescente que la verdad le hará libre.
Nuestra segunda recomendación es que se fomente la voluntad. No le dejen vencer por sus pequeños caprichos que al final se convierten en grandes esclavitudes.
Sin libertad de acción, un deseo incontrolable o incontenible se realiza en forma de acto impulsivo, al no contar con la capacidad del niño para impedirlo.
Algunas ideas para fomentar la voluntad
Como toda norma de educación es más fácil comenzar a educar la voluntad de nuestros hijos de pequeños, creando hábitos de comida, de trabajo y de juegos con horarios disciplinados. También fomentando las virtudes de la fortaleza y de la sobriedad desde pequeños. Fortaleza ante las pequeñas caídas. Ante las frustraciones del juego. Ante las comidas no apetecibles. Fortaleza de los padres para fomentar la fortaleza en los hijos.
Y sobriedad a la hora de crear un ambiente familiar.
Cuando los hijos son adolescentes o preadolescentes es conveniente:
- Dejarles hacer y tomar decisiones y pedirles que las fundamenten
- Pedirles que terminen lo iniciado, aunque les cueste
- Eliminar evasiones ante cualquier tema de responsabilidad
- Hacer que tengan metas o retos y animarles a que los consigan, ya sean en deporte, en conocimiento o en amistades
- Cumplir encargos, todos los adolescentes en casa deben tener una tarea que cumplir que les suponga esfuerzo y colaboración: hacer y limpiar su cuarto, hacer encargos…
- Desarrollar aficiones con búsqueda de perfección
- Fomentar el esfuerzo y sepultar la blandenguería
- Animar a que resuelvan sus problemas por ellos mismos
- Animar a que teniendo sed vacíen un vaso de agua antes de beber
- Saber esperar un minuto de pie a la vuelta de una excursión cansada
- Aun teniendo hambre saber esperar a que todos los familiares estén sentados a la mesa antes de empezar a comer.
- Son estos pequeños actos de voluntad diaria los que forjan una gran y sólida fuerza de voluntad capaz de vencer el vicio de decir mentiras.
- La voluntad no se compra ni se fabrica en bloque, hay que irla fortaleciendo poco a poco, negando el quiero y el abrazando el debo.
¿Y tú que opinas?