Una madre nos escribe preocupada por la falta de crecimiento de su hijo preadolescente diagnosticado con TDAH
Si hemos entendido bien tu carta, tu hijo padece dos problemas, uno su viejo problema de falta de atención e hiperactividad y dos su lento desarrollo. El crecimiento se sucede durante el sueño, esto quiere decir que tu hijo para crecer necesita dormir a diario 10 horas, necesita también calcio, esto quiere decir que tiene que tomar a diario tres grandes vasos leche y necesita hacer ejercicio para que sus músculos y huesos se fortalezcan, esto quiere decir que todos los días tiene que estar haciendo ejercicio físico al aire libre por lo menos una hora.
Pero además durante la preadolescencia para crecer sano se necesita sentir mucho amor, por eso desde la Fundación Belén proponemos como primer remedio a todos los males, un cambio en la comunicación padres/hijo. Ejercer una comunicación gestual y sobre todo afectiva. Sorprenderle hoy con un abrazo cariñoso, furtivo, rápido, por la espalda, cuando no se lo espera y le decís al tiempo: ¡cuánto te quiero¡. Los dos padre y madre. Y mañana otro abrazo. Todo muy rápido y muy sentido. El amor es necesario expresarlo, y hacerlo entender, y demostrarlo. Aunque no lo parezca el preadolescente lo que más necesita son vuestras pruebas de afecto y aprobación. Al mismo tiempo que le dais un abrazo pasado mañana decirle alguna frase positiva «que guapo estás», «que bien te siente esa camisa», «qué buen criterio tienes»… Y pasado multiplicar el abrazo por dos. Mañana y tarde. Y las frases cada vez mas positivas «cuanto me alegra que hayas llegado a tiempo», «cada día confío mas en ti»… Preguntarle por sus gustos y opiniones: tras ver juntos un programa de televisión, o un partido, o una película «¿te ha gustado?» , ¿qué te parece el director o el entrenador?…
Para que tu hijo crezca sano y acepte y cumpla las pautas de conducta por ti marcadas, debe sentir como una palanca estimulante tu afecto y admiración, entenderlos, para aumentar su seguridad y su autoestima. Lo que de verdad necesita tu hijo para crecer -por dentro y por fuera- es afianzar su personalidad gracias a tu amor, respeto y admiración. Recuerda que la familia tiene un papel importante, fundamental en esta tarea de la creación de autoestima por parte del preadolescente. Día a día con perseverancia. El amor hace milagros.
Prueba esta terapia durante tres meses. Te aseguro que te sorprenderá su crecimiento y su cambio de actitud.
¿Y tú que opinas?