La hermana de un adolescente encerrado en su cuarto nos escribe muy preocupada
El “aislamiento adolescente” como problema psicológico serio se define como aquel joven que se siente abrumado por la propia sociedad y es incapaz de cumplir con los papeles sociales que se espera de él, reaccionando con un aislamiento familiar y social. Este problema que comenzó en Japón (hikikomori en japonés es «aislamiento») tiene un componente de alteración psicológico y un componente social (se amparan y comunican con el mundo a través del ordenador personal o del teléfono móvil). A menudo estos jóvenes se encuentran tristes, pierden sus amigos, se vuelven inseguros, tímidos y hablan menos. Frecuentemente son objeto de burla en el centro escolar, lo cual puede ser el primer detonante para su aislamiento, y con frecuencia han vivido muchos momentos de soledad porque con frecuencia sus dos padres trabajan.
Su aislamiento, su silencio o su apatía es muchas veces una muy mala forma de decir: socorro, ayúdame¡ Desde la Fundación Belén proponemos a los padres como primer recurso iniciar una nueva fórmula de comunicación gestual afectiva.
Empezar la primera semana dándole al joven diariamente un abrazo sorpresivo por la espalda en silencio, cuando no se lo espere, rápido e intenso. Madre y padre en distinto momento.
La segunda semana dos abrazos, mañana y tarde.
La tercera semana decirles al tiempo una frase cariñosa: «cuanto te quiero¡», «que bien te sienta esta camiseta», «que alegría verte¡¡¡»…
La cuarta semana pedirles además su parecer al tiempo del abrazo: ¿qué te apetece cenar hoy? ¿quieres que veamos juntos el partido?
Es muy importante que el joven perciba todo lo mucho que su familia le quiere y lo mucho que os importan sus silencios, encerramientos y aislacionismo.
El joven necesita vuestra admiración para crecer en su autoestima. Y necesita pasarlo bien en familia, hacer excursiones juntos, cenar a diario en familia con la televisión apagada, para salir del aislamiento artificial en que se han envuelto.
Decían los clásicos griegos: «quiéreme cuando menos lo merezco, porque es cuando más lo necesito» y la moderna psicología abunda en esta idea: el amor todo lo cura, el amor es la mejor medicina familiar. Probar esta terapia dos meses y escríbenos con los resultados.
¿Y tú que opinas?