Un padre nos escribe preguntando por las posibles consecuencias educativas de su divorcio reciente
Los hijos sufren mucho por el divorcio de los padres, es una realidad que los padres deben asumir y comprender. Así como los hijos deben comprender que no siempre un matrimonio es capaz de vivir felizmente juntos.
Como su separación es reciente, nuestro primer consejo es que se debe tomar un tiempo de acomodación, tanto para su espíritu como para que los niños puedan reaccionar bien. Tiempo de acomodación que debe ser un tiempo más feliz para Usted y para sus hijos y por supuesto para el conjunto de los tres.
En este tiempo debe hacer un esfuerzo grande por mejorar la comunicación afectiva gestual.
Desde la Fundación Belén proponemos a los padres una nueva fórmula de comunicación gestual afectiva.
Empezar la primera semana dándole diariamente a cada uno de sus hijos, un abrazo sorpresivo por la espalda en silencio, cuando no se lo espere, rápido e intenso.
La segunda semana dos abrazos, mañana y tarde. Siempre en silencio y de forma sorpresiva.
La tercera semana decirle al tiempo una frase cariñosa: «cuanto te quiero¡», «que bien te sienta esta camiseta», «que alegría verte¡¡¡»…
La cuarta semana pedirle además su parecer al tiempo del abrazo: ¿qué te apetece cenar hoy? ¿quieres que veamos juntos el partido?
Es muy importante que sus hijos perciban todo lo mucho que les quiere y lo mucho que le importan sus acciones, ideas y opiniones. Sus hijos necesitan toda su admiración para crecer en autoestima. Y necesitan pasarlo bien en familia, jugar juntos los tres, hacer excursiones juntos los tres, cenar a diario juntos los tres con la televisión apagada, y si puede ser habiendo cocinado antes los alimentos. Tus hijos necesitan reírse contigo para poder salir del aislamiento artificial en que se han envuelto.
Decían los clásicos griegos: «quiéreme cuando menos lo merezco, porque es cuando más lo necesito» y la moderna psicología abunda en esta idea: el amor todo lo cura, el amor es la mejor medicina familiar. Prueba esta terapia dos meses y escríbenos con los resultados.
Por lo demás, los problemas de aprendizaje de sus niños pueden ser una consecuencia del periodo convulso anterior a la separación, por tanto no cambie de escuela a los niños. Hable con sus profesores y tutores sobre su separación matrimonial, para que ellos también sean más comprensivos y afectivos con los niños. Y confíe en Dios, con su ayuda y estas medidas Usted comprobará que sus hijos cambiarán de actitud y mejorará su conducta.
¿Y tú que opinas?