Una profesora nos escribe solicitando asesoramiento sobre una alumno en el que ha detectado ideas suicidas
enhorabuena por estar involucrada en el bienestar social de un adolescente. Desde 1996 ofrecemos información y formación gratuitas a familias con hijos con problemas. No tenemos centros escolares, ni centros asistenciales para niños, nuestro objetivo no son los chicos, sois las familias con hijos con problemas. Todos los que en ella trabajamos somos voluntarios, estamos ubicados en Madrid (España), pero procuramos información a todo el mundo de habla hispánica.
Un intento de suicidio hay que tomárselo siempre muy en serio. Un intento de suicidio es un indicio grave. Ese adolescente necesita ayuda médica y psicológica URGENTE. Puede tener una depresión, puede estar sufriendo un desencanto amoroso, puede no tener resiliencia…Pero es preciso ayudarle a salir de ese agujero, el que sea.
Como madre o maestra o amiga de ese adolescente que está en riesgo de suicidio, debe acompañarle al médico psiquiatra en primer lugar. Después puede ayudar a la madre del adolescente a modificar su comunicación gestual afectiva.
Empezar la primera semana dándole diariamente un abrazo sorpresivo por la espalda en silencio, cuando no se lo espere, rápido e intenso.
La segunda semana dos abrazos, mañana y tarde.
La tercera semana decirle al tiempo una frase cariñosa: «cuanto te quiero¡», «que bien te sienta esta camiseta», «que alegría verte¡¡¡»…
La cuarta semana pedirle además su parecer al tiempo del abrazo: ¿qué te apetece cenar hoy? ¿quieres que veamos juntos el partido?
Es muy importante que ese adolescente perciba todo lo mucho que le quieres y lo mucho que te importan sus acciones, ideas y opiniones. Ese chico necesita la admiración de su madre para crecer en su autoestima. Y necesita también pasarlo bien en familia, jugar juntos, hacer excursiones juntos, cenar a diario juntos en familia con la televisión apagada, para poder salir del aislamiento artificial y de la depresión en que se ha envuelto.
¿Y tú que opinas?