Una abuela nos pregunta desesperada que se puede hacer por modificar el comportamiento agresivo y rebelde de su nieta con 7 años
Gracias por escribir a la Fundación Belén y contarnos el problema de conducta de su nieta de (suponemos pues no nos escribe su edad) 6/7 años.
El problema de la agresividad infantil es una de las alteraciones de conducta que más preocupan a padres y maestros junto con la desobediencia. Nuestro primer consejo es acudir al médico. Un correcto diagnóstico mejora siempre una conducta agresiva que habitualmente suele predecir otras patologías psicológicas en la edad adulta.
Una vez descartado cualquier problema médico, deberían empezar a poner límites a la conducta de su nieta con premios y castigos apropiados a su edad. Hablen con ella muy seriamente, con un papel y lápiz delante fijen las normas de «buena conducta».
Los padres deben establecer las normas y los límites sobre lo que es de obligado cumplimiento para la niña: su salud, su educación y la convivencia conforman el primer escalón.
* La salud comprende: normas de seguridad (no cruzar la calle sin mirar, no asomarse a la ventana…), normas de alimentación (se come lo que hay en el plato masticando bien…) y normas de conducta (no pegar, no tirar al suelo, higiene personal, horarios..)
* La educación comprende: normas de obediencia en cumplimiento de horarios, en ayuda en el hogar (recoger juguetes, ordenar ropa…) en visionado de Televisión (siempre por debajo de UNA hora diaria…), en asistencia y puntualidad al centro escolar.
* La convivencia comprende: normas de afecto entre los miembros de la familia (darse un beso y un abrazo al levantarse y acostarse, irse y volver a la escuela…), normas de tratamiento entre los miembros de la familia sobre todo con su hermanita y en la escuela con los profesores.
Como abuela ocupada en la buena crianza de sus nietos le recomendamos que aproveche bien esta edad: piense en cuando tenga la niña 15 años, y ayude a los padres de la niña a sentar las bases de una buena educación, es el momento de empezar a hablar de «portarse bien». Y es el momento de establecer premios y castigos.
Que la niña se porta bien, premio. ¿Qué premio? La «atención» y un GRAN abrazo instantáneo, sobre la marcha justo después de haberse controlado, obedecido y ayudado es el mejor premio. Si lo acompañan con una frase alentadora tipo: «lo has hecho muy bien»; «cuanto me alegro por tu buen comportamiento»; «Eres genial¡, que bien te portas…», mucho mejor.
Que la niña se porta mal: castigo. Qué tipo de castigo? «la desatención» : no hacerle caso en cinco o diez minutos. Usted o su mamá o su papá se vuelven de espaldas y siguen haciendo sus tareas. No le hablan, no le miran, no le escuchan… en cinco o diez minutos. Y después la reprende suavemente y con argumentos tipo » que pena que te portes tan mal, con lo bien que tu sabes hacerlo…»; «me gustaría mucho que la próxima vez obedezcas y cumplas bien, como tú sabes…»; «hacer las cosas bien es la forma de agradar en la vida a los demás, y tu sabes cómo conseguirlo»…Otro castigo es: No ver la televisión, diez minutos, media hora o una tarde. No jugar con la play station en un día o dos…
Los padres deben enseñar límites a los niños, sin violencia (nada de pegar) ni rigidez, pero sí con firmeza y coherencia. Y sobre todo con perseverancia
¿Y tú que opinas?