Un padre nos pregunta que medidas debe tomar frente al diagnóstico reciente que le han dado a su hija de 9 años
En primer lugar enhorabuena por ser una persona comprometida con el bienestar de su hija, esta es la mejor formula de crianza: el amor y la cercanía.
Desde la Fundación Belén nos gustaría comentarle varios temas muy relacionados con la educación de su hijita.
* Uno. Según los últimos descubrimientos en neurología la inteligencia es plástica, quiere decir que no tenemos el mismo coeficiente durante toda la vida: depende de lo que hacemos. HACER es el verbo del aprendizaje.
Puedes leer más sobre este tema en la web de la Fundación Belén https://fundacionbelen.org/base-datos/plasticidad-cerebro/
* Dos. No se debería marcar la inteligencia de un hijo desde pequeño con un calificativo como «límite».
El futuro de su hijo sólo lo conoce Dios, pero depende mucho de su actuación: ame a su hijita muchísimo, dígale a diario «te quiero» varias veces, al tiempo que le abraza: el amor es la mejor medicina familiar. El amor a tu hija será la llave de su capacidad de esfuerzo por aprender, por ser mejor cada día.
* Tres. Los hijos crecen conforme las expectativas de sus padres y maestros. Es el llamado efecto Pigmalión muy interesante y esclarecedor: https://fundacionbelen.org/base-datos/efecto-pigmalion/
* Cuatro. Cada niño, cada niña, necesita una fórmula de aprendizaje diferente, y para los que tienen más dificultad de aprendizaje, los métodos pedagógicos que inciden más en el HACER, tipo Montessori o Waldorf, o Giner, son mas convenientes.
Quizá cambiando de colegio a su hija aprenda más y mejor. Cambiándola hacía un centro escolar que siga uno de estos método, la capacidad de aprendizaje de su hija puede mejorar mucho.
También puede recordar la historia del inventor Edison visionando este video : https://www.facebook.com/HISTORIASpain/videos/10156756243260403/ En sus 84 años de vida, Thomas Edison patentó más de 2.000 inventos. Sin embargo, su paso por la escuela fue breve: fue su madre, Nancy Edison, la encargada de educarlo porque a su hijo le echaron del colegio.
Estimado amigo tiene por delante una tarea apasionante: sacar adelante a su niña, hacer de ella una mujer feliz y capaz de hacer felices a los demás empezando por Ustedes, sus padres.
Lo conseguirá. Tenga fe y empiece ya: ¡manos a la obra!
¿Y tú que opinas?