Una madre nos escribe desconsolada porque su hijo adolescente ha sufrido una traición por parte de un amigo y su pareja
El dolor de corazón se cura como en el infarto físico con un cambio de vida, de aires y de actitud ante la vida. Desde la Fundación belén entendemos que quien te traiciona no era digno de tu amistad ni de tu compañía. Pero este convencimiento no quita el dolor de corazón.
Los sentimientos no son fáciles de manejar porque no nos han enseñado a leerlos, entenderlos y expresarlos. En el dolor de corazón está implícito la ira, la tristeza, la pasión por venganza, el amor propio lastimado… una mezcla explosiva de sentimientos difíciles de contrarrestar. Porque ya sabemos que el repertorio de sentimientos negativos es muy superior a los sentimientos positivos, entre los que contamos tan solo la alegría y el humor, si es que se entiende el humor como un sentimiento.
Nuestra recomendación es que procures viajar con tu hijo, va a ser para él una esperanza y quizá una oportunidad de conocer personas más fiables. Y debes hablar con tu hijo sobre que el problema lo tienen ellos, los que han traicionado el amor y la amistad. El único problema para tu hijo es salvar su propia circunstancia y seguir siendo fiel al proyecto de persona que quiere ser: transformar esta situación dolorosa en un trampolín que le ayude a crecer como persona.
¿Y tú que opinas?