El papá de un bebe de siete meses, se queja de que es ahora cuando le han diagnosticado una anoma´lía en la cadera, nos describe el problema de su hijito y nos solicita información.
Las anomalías congénitas de la cadera, la pierna y el pie a veces no son evidentes tras el nacimiento del bebé. Las causas de estas anomalías pueden ser por posición intrauterina, laxitud ligamentosa y/o deformidades esqueléticas. Algunas anomalías se resuelven sin intervención; en cambio, otras requieren tratamiento.
Afortunadamente en el caso de su hijito su anomalía es visible y por tanto se puede empezar desde ya mismo a intentar solucionar. Si sería muy recomendable que un buen especialista en traumatología infantil viese a su bebé y a el deberían acudir en primera instancia.
¿Y tú que opinas?