Promoción de la salud por los padres
Para saber más
Definición
La salud según la Organización Mental de la Salud OMS : “La salud se define como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.”
La promoción de la salud, según la Carta de Ottawa un documento elaborado por la Organización Mundial de la Salud, durante la Primera Conferencia Internacional para la Promoción de la Salud, celebrada en Ottawa, Canadá, en 1986, consiste en proporcionar a la gente los medios necesarios para mejorar la salud y ejercer un mayor control sobre la misma. La Carta reafirma el derecho al propio control de la salud por parte de los individuos y grupos, surge en Ottawa la noción de capacitación. Desde 1990 para la OMS la promoción de la salud es concebida como “los procesos que favorecen el control de los individuos y grupos sobre las variables que condicionan su propia salud “, representa la suma de las acciones de la población, los servicios de salud, las autoridades sanitarias y otros sectores sociales y productivos, encaminados al desarrollo de mejorar las condiciones de salud individual y colectiva.
La promoción de la salud es parte también de nuestra tarea como padres y educadores.
La promoción de la salud se nutre de muchas disciplinas y crea una innovadora teoría y práctica de salud pública que permite cumplir metas y objetivos sociales, como conseguir comunidades e individuos que actúen más «saludablemente», mejorando su calidad de vida y social.
Características
- Implica a la población en su conjunto y en el contexto de su vida diaria, en lugar de dirigirse a grupos de población con riesgo de enfermedades específicas.
- Se centra en la acción sobre los determinantes de la salud para conseguir que el ambiente, que está más allá del control de los individuos, sea favorable a la salud.
- Combina métodos o planteamientos diversos pero complementarios, incluyendo comunicación, educación, legislación, medidas fiscales, cambio organizativo y desarrollo comunitario.
- Aspira a la participación efectiva de la población, favoreciendo la autoayuda y animando a las personas a encontrar su manera de promocionar la salud de sus comunidades.
- Aunque la promoción de la salud es básicamente una actividad del ámbito de la salud y del ámbito social, y no un servicio médico, los profesionales sanitarios, especialmente los de atención primaria, desempeñan un papel importante en apoyar y facilitar la información sobre la salud.
- Fomenta el apoyo a la autoayuda, los autocuidados, las redes sociales y el reforzamiento comunitario, actividades claramente vinculadas con la función de capacitación.
Principios científicos
Para Antonovsky el verdadero objetivo de estudio de la Salud Pública no era tanto las personas que sufrían, para tratar de evitar sus causas, como el del estudio cuidadoso de personas con plenitud que no enfermaban a pesar de estar expuestos a factores de riesgo, para imitarlas. Partía de la base de que es mucho más popular instar o incitar que prohibir. El trabajo de Aaron Antonovsky supuso el primer intento riguroso de vertebrar una teoría explicativa del sufrimiento humano, prescindiendo de la nosotaxia médica y partiendo no tanto de planteamientos de déficit sino de aspectos positivos.
El trabajo de Blum, más orientado a la acción que el de Antonovsky, a su vez más teórico, supone los primeros intentos de propiciar cambios mas allá de la acción curativa desde el sistema sanitario. Por su relación con las teorías del cambio social y el análisis holístico como opuesto al cartesianismo, Blum introduce conceptos que luego fueron la base de la promoción de la salud como la acción intersectorial, la participación y el desarrollo comunitario.
La llamada tercera cultura, un movimiento autoproclamado de intelectuales que pretende la unidad del conocimiento entre las ciencias experimentales y cerrar el cisma entre ciencia y humanidades, se presenta así, como una iniciativa de especial interés para la Promoción de la Salud.
¿Cómo se promueve la salud desde la familia?
Desarrollando habilidades personales. Mediante el aprendizaje, el desarrollo de aptitudes y conductas en los hijos, también se puede realizar promoción de la salud. Estas actividades se pueden realizar a través de ciertos canales, como las escuelas, los lugares de trabajo y muy principalmente la familia: MªAngeles Durán estimó en 1999 que del conjunto de horas que en nuestro país se dedican a la atención de personas enfermas, las familias (sobre todo las mujeres) desempeñan un 88%, mientras que al personal sanitario corresponde el 12% restante. ¿Cómo se promueve la salud desde la familia?
- Mejorando la estimulación psicosocial, esto es mejorando los vínculos afectivos durante el desarrollo infantil temprano. Para que el niño tenga un desarrollo positivo es esencial que entre el bebé y su madre (u otra persona que lo cuide) exista un fuerte vínculo creado por la estimulación psicosocial. La formación de ese vínculo en las primeras fases de la vida es un paso esencial que sienta las bases para el posterior desarrollo cognitivo, emocional y social. La estimulación psicosocial se define a la estimulación física que proporciona el medioambiente a través de los sentidos (visión, audición, olfato, gusto y tacto), así como a la estimulación emocional proporcionada por el vínculo afectivo entre la familia (en especial la madre) y el niño.
Tipo de estimulación Qué hacer Ejemplos Estimulación emocional: las intervenciones para mejorar las interacciones entre el niño y la persona que lo cuida son importantes para facilitar su desarrollo emocional, social y lingüístico. Esto puede lograrse destacando la importancia de la comunicación emocional Manifestar al niño calor y afecto de forma acorde con las normas culturales Alentar a las personas que cuidan al niño a que lo miren a los ojos y le sonrían, especialmente durante la amamantación, y le expresen físicamente el afecto (tenerlo en brazos y mimarlo) Fomentar la comunicación verbal y no verbal entre el niño y la persona que lo cuida Comunicarse con el niño lo más posible. Hacerle preguntas simples y responder a sus intentos de hablar. Intentar mantener una conversación con sonidos y gestos (sonrisas, miradas). Hacer que el niño vocalice y ría. Enseñarle palabras con actividades. Por ejemplo, decir “adiós” acompañado del gesto correspondiente Responder a las necesidades del niño Responder a los sonidos e intereses del niño. Estar atento a sus necesidades, indicadas por su comportamiento (llantos, sonrisas) Mostrar agradecimiento por los progresos hechos por el niño Manifestar aprobación verbal ante sus logros y acompañarla de signos no verbales de agradecimiento y aprobación (sonrisas, palmas) Estimulación física: los niños necesitan un entorno físico estimulante para que puedan desarrollar sus habilidades psicomotoras y lingüísticas y mejorar su desarrollo cognitivo Hacer que el entorno proporcione al niño experiencias sensoriales adecuadas Encontrar medios para que el niño vea, oiga y se mueva. Por ejemplo, colocar objetos de colores a su alrededor y estimularlo para que los alcance o gatee hacia ellos. Cantarle y hacer juegos con los dedos de las manos y de los pies Proporcionarle materiales lúdicos Se pueden hacer juguetes baratos y divertidos, como rompecabezas y sonajeros, con cartones y botellas de plástico. Véanse ejemplos en el apartado de referencias Dar significado al mundo físico del niño Ayudar al niño a nombrar, contar y comparar objetos. Por ejemplo, darle tapones de botellas de plástico y enseñarle a apilarlos. Los niños mayores pueden clasificarlos por colores y aprender conceptos como “alto” y “bajo”. Describirle lo que está ocurriendo a su alrededor Darle oportunidades de practicar sus habilidades Es importante jugar individualmente con el niño al menos 15 a 30 minutos al día, y darle la oportunidad de que juegue con otros niños Fuente: OMS
- Mejorando la alimentación:
Desde el mismo momento del nacimiento para ayudar a establecer vínculos positivos entre el niño y quienes lo cuidan. Para que el niño tenga un desarrollo positivo es muy importante la crianza con leche de su madre. Los dos primeros años de vida son periodos críticos de máximo crecimiento físico y cerebral. En este periodo las carencias nutricionales y psicosociales pueden causar disfunciones y discapacidades que persistirán durante toda la vida.Recomendaciones diarias de calcio:Edad miligramos 1 a 2 500 4 a 8 800 9 a 18 1.300 18 a 50 1.000 a partir de 51 1.200 Contenido de calcio en algunos alimentos:
Alimento miligramos 240 ml leche 300 60 grms queso 300 180 ml yogur 225 30 grms almendras 80 ½ taza de habas 40 ½ taza de brócoli 35 150 grms sardinas 325 - Mejorando los hábitos de higiene.
- Lavarse las manos
Se debe explicar a los niños lo importante que resulta lavarse las manos después de tocar algo que pueda estar sucio, especialmente un animal, después de ir al aseo, antes de comer o de tocar a una persona más débil ante las infecciones. Lavarse las manos se debe convertir en un acto reflejo inteligente. - La higiene bucal Comprende la eliminación de los restos de comida, de la placa dental, el cuidado de las encías a diario, así como las visitas regulares al dentista. Los dientes se deben cepillar después de cada comida y como mínimo dos veces al día, siguiendo una técnica eficaz (la secuencia «Cepillado de los dientes»):
- dentífrico;
- cepillar de arriba a abajo con un ligero movimiento circular, por delante, por detrás y encima de los dientes, durante tres minutos;
- enjuagar la boca.
Asimismo, debe quedar clara la idea de que no hay que meter los dedos ni objetos en la boca. Del mismo modo, el azúcar y los caramelos favorecen la proliferación microbiana.
- El baño para el niño debe ser una fuente de placer y de salud.Un cuerpo sucio constituye un terreno propicio para el desarrollo microbiológico. El polvo, el sudor y otras secreciones, así como el calor, son algunos de los muchos factores que favorecen la multiplicación microbiana. Por ello, después de cualquier actividad física se debe tomar una ducha o un baño, utilizando de forma eficaz un jabón.
Las secreciones normales, sin haber hecho ningún esfuerzo físico, bastan para favorecer el crecimiento de los microorganismos. Por lo tanto, la ducha diaria se debe convertir en un hábito de todos. - Vestimenta: asimismo, es necesario utilizar ropa limpia y cambiarla a diario. Por si este hecho no queda demasiado claro, debemos saber que un simple trozo de tela puede contener más de 105 gérmenes por cm² (Scott & Bloomfield) después de estar en contacto con ella un solo día.
- Lavarse las manos