¿Cómo tener un hijo adolescente…y ser feliz?
- No se considere agraviado por lo que los adolescentes hagan: no es nada personal… es simplemente su crisis.
- No tome los problemas de sus hijos como propios: deje que él maneje su vida y tome sus decisiones. Pero exíjale que éstas no afecten a los demás.
- Establezca con su hijo (gano-ganas) los límites y normas necesarias para vivir en armonía.
- Si su hijo tiene un problema serio, ayúdele, pero no se amargue usted la vida: no añada un problema a otro problema.
- No se puede «obligar» a nadie a ser bueno: hay que venderle la idea y ayudarle con ideas y con acompañamiento.
- El bien de la familia está antes que el bien del adolescente. Conviene, sin embargo, conseguir las dos cosas.
- Desconcierte -de vez en cuando- a su hijo. No sea tan predecible que su hijo/a sabe siempre qué esperar de usted.
- No tome decisiones sobre la marcha, ni acepte hechos cumplidos. Calma, paciencia, reflexión…y después actuar con firmeza.
- Si usted se sale de casillas, su hijo lo manipula y lo domina, ganó la batalla.
- Tenga un interés real y genuino por las cosas del adolescente.