Personalidad fuerte
Una madre nos escribe preocupada porque en el centro escolar de su hija de 9 años le han dicho que la niña tiene una «personalidad fuerte» y no sabe con seguridad a que se refieren o si es un mal diagnóstico.
Gracias por escribir a la Fundación Belén con sinceridad y sencillez. Es muy buena costumbre el preguntar lo que no se comprende. Es una virtud es saber demostrar nuestro grado de comprensión hacía la persona con la que estamos hablando. Gracias. Y quédese tranquila con el comentario de la tutora. Tener personalidad es bueno y que sea una cosa buena además sea «fuerte», es doblemente bueno.
Si cabe hacer algún reparo a la profesora/tutora es no ser más clara, y si cabe hacerle algún reparo a Usted misma, es no hacerle esta misma pregunta a la profesora en cuestión: ¿a qué se refiere exactamente con «personalidad fuerte»?
Pero es una buena lección para aprender. Los padres con frecuencia delante de quien consideramos tiene más conocimientos, ya sea el médico o la profesora, nos quedamos en silencio sin preguntar lo que no acabamos de entender. Y no debe ser así. Porque somos los responsables primeros y últimos de la crianza de nuestros hijos.
Debemos -es nuestro deber como padres- en primer lugar ATENDER las explicaciones de estos «expertos custodios» ya sean profesores o médicos; pero es su obligación hacerse ENTENDER. Y si nos quedamos con dudas es nuestro derecho preguntar.