Una madre nos pregunta si es posible que su niña de 4 años sea superdotada
¿Posible? Claro que es posible y a tenor de su descripción, es más que probable. Usted debe sentirse muy satisfecha pues sin duda su hija ha tenido muy buenos estímulos en el hogar ya que sin esos estímulos diarios y continuados durante estos 4 años no tendría la capacidad intelectual que hoy día tiene.
Los padres -sobre todo las madres- sabemos cuándo un hijo es superdotado o tiene altas capacidades y podemos hacer mucho por estimular y ofrecer autoconfianza en estos chicos.
Porque los hijos crecen conforme a las expectativas de los padres: se ven en nuestros ojos. Puede leer sobre este tema el llamado «Efecto Pigmalión» en nuestra web: https://fundacionbelen.org/base-datos/efecto-pigmalion/
Debe también conocer que los últimos descubrimientos en neurología afirman que el cerebro es plástico: somos lo que hacemos. No tenemos un índice de inteligencia fijo, depende de lo que hacemos. Puede leer sobre este tema en nuestra base de datos: https://fundacionbelen.org/base-datos/plasticidad-cerebro/
Así pues ofrézcale a su hija múltiples actividades en su tiempo libre. HACER es el verbo del aprendizaje. Pídale que pinte lo que ha aprendido en clase. Pídale que se invente una historia y la ilustre o dibuje. Alabe sus dibujos y sus escritos mucho. Y seguirá creciendo intelectualmente. Ofrézcale libros de ciencias naturales, de matemáticas, de física…. Ofrézcale muchas tardes jugar al ajedrez… Es muy importante también que os divirtáis juntas bailando, viendo cine o haciendo teatro, y muy importante que al volver de la escuela practique aficiones: bicicleta, música, pintura, fotografía…
Para su información puede leer un artículo interesante en la revista EL Tiempo: https://www.eltiempo.com/vida/ninos-superdotados-una-infancia-diferente-272664
Es muy necesario que Usted hable con los profesores de la escuela de su niña para que sean conscientes del potencial intelectual que tiene su hija. Porque pueden y deben ofrecerle ayuda en su educación.
Hasta que acabe los estudios secundarios tiene su hija que tener paciencia y perseverancia, porque seguro se va a aburrir en clase siguiendo el ritmo de sus compañeros…después, dentro de muchos años y ya su hija en la universidad rendirá todo lo que su vocación y cerebro puedan dar de sí.
¿Y tú que opinas?